Cambiando mucho de tercio con respecto a mis anteriores libros, acabo de publicar una novela juvenil, escrita en forma de diario, que narra las divertidas desventuras veraniegas de la patética adolescente Pat.
Lo he pasado muy bien en compañía de Pat y estoy satisfecha con el resultado de nuestro mutuo esfuerzo. La novelita es original, divertida, y mezcla escenas de lo más cotidiano (en términos de adolescencia, o sea, elección de ropa, avistamiento de granos, charlas sobre chicos…y poco más) con otras disparatadas, así como con graves peligros que conducen a la clásica resolución de un enigma. Si el universo no se confabula en contra, mi idea es continuar sus desventuras en un segundo libro, en el que la pobre Pat regresaría al martirio de Alcatraz (el colegio) y aprovecharía las vacaciones navideñas para hacer algún accidentado viajecito en el que, otra vez, su vida pendería de un hilo.
Ya está disponible en papel y en versiones electrónicas (algunas direcciones aquí, aún no está disponible en todas las tiendas). Si haces clic en la imagen podrás leer el comienzo.
Contraportada:
El verano de Pat no ha empezado precisamente bien. Acaba de hacerse acreedora al título mundial a la adolescente más patosa, después de que un “accidente” doméstico haya cambiado “ligeramente” su aspecto para una buena temporada. Pero la culpa no es suya, sino de su pérfida hermana Betsy, que la ha convertido en diana de sus prácticas brujeriles. O, al menos, eso piensa Pat, que no tarda en contraatacar, aprendiendo por su cuenta todo lo referente a las artes mágicas. ¡Lo malo es que solo va a servirle para meterse en toda clase de líos y situaciones disparatadas!
Las cosas prometen mejorar cuando el guapísimo Borja entra en escena, pero un acontecimiento inesperado pondrá a prueba el valor de Pat y la llevará, junto a sus amigos, a intentar descifrar el misterio de los perros asesinos.
Te presentamos las desventuras de esta adolescente única que se cree “mediocre, patosa y del montón”. Un diario hilarante que jamás, jamás (¡gracias a diosa!) podrías haber escrito tú misma.
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